El temor a la chicharrita y su impacto en el maíz tardío en Córdoba

Por el Complejo de Achaparramiento, la superficie implantada con el cereal de segunda siembra para la campaña 2024-25 cayó 12 puntos con respecto al año anterior.

La Bolsa de Cereales de Córdoba destacó que la siembra en Córdoba avanza a un ritmo más acelerado que campañas anteriores, alcanzando el 74% de la superficie proyectada. Según la entidad, la proporción de siembras tardías (realizadas después del 1 de noviembre) se mantiene similar a la estimación del mes anterior, representando el 68% del total.

Este dato refleja una variación significativa en las fechas de siembra respecto a la campaña pasada, cuando el maíz tardío abarcó más del 80% de la superficie sembrada. Se estima que este cambio está relacionado con el mayor impacto de maíces tardíos por el Complejo de Achaparramiento del maíz.

“De acuerdo con lo informado por técnicos locales, una parte de los lotes de maíz temprano se encontraba atravesando el período crítico de definición de rendimientos, mientras que los maíces tardíos se encontraban en etapas iniciales de desarrollo, con las primeras hojas emergiendo”, agrega el informe.

Casi la totalidad de los lotes presentaban un estado general entre excelente y bueno. Sin embargo, una pequeña proporción de la superficie del cereal mostraba condiciones regulares o malas, principalmente debido a los daños provocados por fuertes vientos y granizo en localidades de los departamentos Río Cuarto, Presidente Roque Sáenz Peña y Juárez Celman.

En cuanto a la presencia de plagas, se han reportado casos de oruga cogollera (Spodoptera frugiperda) y chinche de los cuernos (Dichelops furcatus), ambos con niveles de incidencia entre bajos y moderados.

Con la finalización de la siembra de maní, casi la totalidad de la superficie del cultivo se encuentra entre excelente y buen estado general. 

Según indicaron referentes locales, cerca del 20% de los lotes iniciaban la floración. En cuanto al estado sanitario del cultivo, en general no se detectó presencia de plagas o enfermedades, a excepción de un reporte puntual de arañuela (Tetranychus urticae) en baja incidencia en la zona de Hernando.